AGRADECIDO

      Qué locura. Con tanto ingreso y recaída te ves obligado a tomar catorce pastillas y media diarias y no puedes hacer muchas cosas que quieres. Hasta leer lo tienes que hacer en alto para concentrarte y no más de una hora. Tienes que llevar vida de Balneario hasta que se pueda ir bajando medicación y preferirías no tomar nada y trabajar nueve o diez horas al día. Disfrutarías de los fines de semana más.

      Pero no me quejo. Tengo todo lo que quiero y aunque mi ritmo sea lento y a veces esté muy cansado estoy rodeado de gente extraordinaria, personal, telefónica y virtualmente.

       Los días pasan y no hay síntomas depresivos, aunque el cuerpo esté algo entumecido médicamente; pero poco a poco se podrán mejorar las cosas y si no, no debiera quejarme si me acuerdo de Gaza, Siria etc. O de gente con depresión crónica que malvive en hospitales y otros muchos sufrientes en otras situaciones muy complicadas. Al menos disfruto de la comida y del afecto y la respiración y veo el mar todos los días.. Cada uno tiene lo suyo y yo estoy agradecido de lo que tengo.