sábado, 21 de abril de 2018

GANAS DE VIVIR


     Pues que me he venido a dar una vuelta por aquí después de un agotador atardecer y no tengo ni idea de lo que te voy a decir. Últimamente me preocupo por auténticas pijadas. Teniendo como tengo todo lo que necesito resulta que ando preocupado porque no soy capaz de leer un libro desde hace meses. Y mira que me leí unos cuantos en mi vida anterior a esos meses. A la mierda. Pues si no leo no me voy a morir, que a veces parece que es lo que la patología parece decir en alarma. Absurdo.

      Yo ya te he avisado que me venía aquí a soltar unas palabras así sin más pretensiones que hacerlo,  y no esperes pues mucho contenido. Sólo te diré que vivir me parece actualmente toda una aventura en la que el futuro es una incógnita absoluta, como el de todos, pero es que resulta que me levanto con ganas de vivir. Con muchas ganas. No entiendo a que se debe este fenómeno como no entendía cuando me despertaba sin ninguna. Bueno, los científicos dirían que en el caso de las ganas hay mucha serotonina en el cerebro y en el contrario poca. Pero es que últimamente pongo en duda casi todo en esos asuntos. Por si acaso, eso sí, me tomo la medicación. Y a mí qué me cuentas, me dirás con razón

       Me podría pasar una hora metiéndote una chapa insulsa. El problema es que si lo hago da pereza leer cuando la gente ve mucha parrafada al principio y yo quiero que me leas. O sea que adiós. Aunque hayas llegado hasta aquí, comprendo que no me pongas un me gusta, pero es que hoy quería un poco de frivolidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario